Malviviendodelpoker

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Vaya, yo tengo los dedos de las manos morados de cruzarlos, con la esperanza de que me traiga suerte y caigan las mías. Gracias a esta entrada dejaré de hacerlo, y evitaré una lesión a largo plazo que seguramente terminaría en amputación. Se podria decir pues, que este blog acaba de salvar mis dedos para poder seguir clicando botones y malvivir del póquer hasta el día del juicio final. 

Jajja, yo soy más de tocar madera... pero he ido acumulando tantas supersticiones a lo largo de los años que me daría vergüenza hacer una lista pública con ellas. Se la reservo para mi psicoanalista argentina.

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